Han pasado casi 30 años desde que Claudio Kutzwor inició su camino de sanación con las plantas maestras, inicialmente San Pedro o ‘wachuma’, y después ayahuasca y una larga lista de plantas amazónicas e ibéricas que hoy componen la botica de Hermanosis. «Desde muy pequeño sufría de asma. Allá por la adolescencia conocí en Buenos Aires a un terapeuta que acabaría siendo mi mentor y mi maestro, y gracias a quien tuve acceso a las plantas maestras», me cuenta Claudio vía Zoom desde su casa de Madrid.
«Por aquella época, mi hermano Esteban vivía en Europa y, sincrónicamente, entró en contacto con Juan Flores, un renombrado curandero amazónico de la etnia ashaninka. Esteban también tenía problemas de salud. En su caso, tenía una enfermedad diagnosticada en el pericardio, el tejido que envuelve al corazón, y se negó a someterse a una operación, como le recomendaban los médicos en Argentina. Esteban se curó gracias a Juan Flores, a la ayahuasca y a la dieta amazónica, y me recomendó que hiciera lo propio. Yo sufro asma desde los ocho meses. El primer proceso de dieta fueron aquellos dos meses en el Perú, tomando una sola planta, un árbol llamado “ishpingo” y ayahuasca. En aquel entonces, los años 90, no sospechábamos que aquel camino de sanación iba a ser nuestro trabajo, nuestra misión», explica Claudio.
Hacemos flash-forward hasta el presente, año 2021, Península Ibérica. Hermanosis ha cumplido 16 años desde su fundación y desde hace 6 tiene su propio centro de retiros en la Vera de Cáceres, a menos de dos horas de Madrid. En este tiempo, miles de personas han acudido a las ceremonias de medicina amazónica de Hermanosis y varios centenares han participado en alguna dieta organizada por los hermanos Kutzwor. La experiencia atesorada en este período ha servido para elaborar el primer estudio elaborado en Europa sobre el efecto de las dietas amazónicas en la salud -física, energética y emocional- de los participantes. Los resultados son abrumadores:
Se pidió a los participantes que puntuaran de 1 a 5 (siendo 1, “nada”, y 5, “muy alto”) el efecto que había tenido la dieta en doce aspectos distintos de su salud psico-emocional, a saber, ánimo, foco, creatividad, autoeficacia, energía, habilidades, capacidad cognitiva, tranquilidad, calidad del sueño, contemplación, amabilidad, autoconocimiento, conexión y espiritualidad.
El gráfico que reprocudimos a continuación corresponde a la media de 55 personas que han participado en Dietas Chamánicas con Hermanosis. Como puede apreciarse, la puntuación media supera el 4,5, en una escala entre 1 y 5, alcanzando puntuaciones próximas al máximo en categorías como “autoconocimiento”, “capacidad cognitiva”, “conexión” y “ánimo”.
El segundo gráfico corresponde a la media de 54 personas que han participado en retiros de crecimiento personal de fin de semana con Hermanosis. Como puede apreciarse, la puntuación media ronda el 4 (“alto”) y lo supera holgadamente en categorías como “espiritualidad”, “autoconocimiento” y “ánimo”.
Las dietas y los retiros han tenido lugar en El Cielo de la Vera, la ‘Universidad de las Plantas’, el centro de Hermanosis en la Vera de Cáceres.
¿En qué consiste la dieta amazónica?
Cuando en occidente hablamos de “dieta” estamos hablando de perder peso. En el caso de la dieta amazónica no es esa la motivación -si bien puede ser un efecto secundario asociado-; tal y como nos explica Claudio, «cuando un miembro de una sociedad tradicional amazónica enfermaba, se le llevaba a un lugar retirado, aislado del resto del grupo, y se sometía a una dieta muy básica, arroz, bananas, algo de fruta y pescado, sin sal ni especias ni carne, acompañado de las plantas medicinales que determinara el médico o curandero. Es imperativo también alejarse de influencias, distracciones y ondas electromagnéticas». Durante el proceso, el dietante va activando las capacidades autocurativas del cuerpo, siempre con la ayuda de las plantas que está dietando.
Las dietas que hace Hermanosis en España se inspiran en las dietas amazónicas, si bien incorporan una pequeña aportación e introducen un cambio sensible. La aportación son las plantas locales, las plantas europeas que, obviamente, también tienen un espíritu y una función curativa. Las plantas a dietar -en torno a un centenar, entre ibéricas y amazónicas- vienen elegidas tras una consulta de kinesología. El ingrediente novedoso que no vas a encontrar en el Amazonas es el acompañamiento terapéutico, tanto por parte de Claudio y Esteban como el equipo de psicólogas, terapeutas y psiquiatras con que cuenta Hermanosis.
¿Por qué es importante el acompañamiento terapéutico? En palabras de Claudio Kutzwor: «Nuestras historia personal condiciona nuestro aparato perceptivo. Las plantas lo que hacen es amplificar nuestra percepción, y muchas veces es importante tener una persona al lado que nos ayude a ‘aterrizar’ lo que está pasando, y acompañarnos en los pasos que debemos dar para estar mejor. No es suficiente con tomar planta, es importante lo que nos llevamos a la cotidianeidad de tomar planta. Si no tenemos herramientas para cristalizar nuestro deseo es difícil transformarnos. Ese es el salto transformador que estamos viviendo ahora mismo».
La ‘universidad’ de la selva
En la selva no se enseña como en la universidad. La enseñanza es absolutamente empírica y desde la comprobación. Cuando quieres preguntarle algo a tu maestro tienes que ir con la información clara, porque él no te va a dar cátedra», recuerda Claudio de su enseñanza con Juan Flores. «Luego recibimos el permiso de compartir esto con otra gente. Nos dio la instrucción de que no podíamos hacerlo gratis, esto se tenía que cobrar. Nos fue preparando el cuerpo, eso fue lo más importante (…) En estos 30 años hemos trabajado con tres maestros, no son muchos, pero yo creo que la enseñanza tiene que ser así. En el mundo de la medicina tradicional, uno tiene que tener al menos 26 dietas para empezar a ser considerado. Eso implica muchos años de trabajo».
¿En qué ha cambiado la ayahuasca y la floresta desde los años 90, cuando los hermanos Kurzwor empezaron a frecuentarla? «Yo creo que los que cambiamos fuimos nosotros. Hubo una clara inclinación hacia el mundo psicoterapéutico por nuestra parte. Tanto Esteban como yo nos formamos como terapeutas. Yo, por ejemplo, tengo un posgrado en ‘councelling‘, una certificación como analista transaccional en ese área, y estoy finalizando mi formación como terapeuta gestáltico… llevo más de diez años dedicado a la terapia. Lo que ha pasado es que nosotros hemos incluinado el puente hacia la psicoterapia, y es ahí en ese puente donde ocurrió la transformación».
Claudio y Estaban Kutzwor: Hermanosis.
Hola soy Julián de argentina. Empecé a leer esta nota y cada vez que avanzaba en mi lectura me metía más en la vibración que expanden a difundir tanta luminosidad y aclaración de la vida. Me cautivo y me lleno de amor el saber qué hay oportunidad en la vida. Yo me siento un privilegiado ya que hace unos pocos años soy relativamente consciente y digo relativamente porque se que me doy privilegios que no van de la mano con lo que yo aspiro y pienso con el corazón. Me doy momentos de conciencia que me congratulo porque sabemos que nada está bien y nada está mal, sólo sabemos que si nuestro corazón nos guía es perfecto. Y esta nota me reflejo y me puso la piel de gallina al entender cual es la dieta amazónica la cual cura (si nosotros estamos dispuestos a curar) todo tipo de enfermedad visible o no. Gracias por compartir y darnos la oportunidad del entendimiento individual para darnos el momento el espacio y el calor que necesitamos en nuestras vidas para querernos amarnos y brindar expansión de sabiduría cada uno con el nivel que tiene y con la oportunidad que se nos otorga. Gracias Hermanosis.
Aclaró que estoy en madrid y busque notas que en verdad me lleguen al corazón y esta es la única con la que congenie y me dio claridad 🙏.
Excelente nota y calidad humana ya que tengo el inmenso agrado de participar en ceremonias de junto a Hermanosis. Alegría, profundidad y sanación en un contexto muy cuidado. Y sobre todo Amor… esta medicina está en el corazón… ahí nos enseñan a encontrarla