El 4 de junio, los tribunales franceses se pronunciarán sobre la culpabilidad o no de Claude Bauchet, acusado de consumir y traficar con una droga conocida como ayahuasca. En 2005, el Ministerio de Justicia francés publicó un decreto que clasificaba la ayahuasca como estupefaciente. Esta decisión política siguió a la absolución de Claude Bauchet y otros miembros de la iglesia del Santo Daime en Francia, que habían sido detenidos y juzgados en 2004.
En 2025 se espera otra decisión, la del Conseil d’Etat (máximo tribunal administrativo de Francia), al que se ha presentado una petición solicitando la desclasificación de la ayahuasca.
Se trata, por tanto, de una batalla que se libra desde hace veinte años en el país vecino, en la que está en juego la libertad religiosa, pero también el propio estatuto jurídico de la bebida amazónica, clasificada por las autoridades francesas como estupefaciente y que siguen ignorando las pruebas científicas que demuestran que la ayahuasca no constituye un problema de salud pública.
El principal acusado en este proceso, Claude Bauchet, acaba de publicar un vídeo en el que explica el «momento crucial» en el que se encuentra el caso y pide a la comunidad internacional que ayude a sufragar los costosos gastos de la defensa legal. La campaña de donaciones ha conseguido ya 37.000 euros, algo más de la mitad del objetivo estimado de 65.000 euros.
«Nuestra estrategia es simple: la ayahuasca no es un estupefaciente. Prohibirla es, por efecto colateral, una violación de la libertad religiosa», porque la ayahuasca es el sacramento inseparable de la religión del Santo Daime», afirma Bauchet en el vídeo.
Estrategia legal
La estrategia jurídica de la defensa de Bauchet se sostiene sobre cuatro pilares:
-Las manipulaciones, irregularidades y falsedades de la clasificación de la ayahuasca en mayo de 2005*.
-El aspecto jurídico y cultural de la ayahuasca.
-La no toxicidad de la ayahuasca.
-La no adicción a la ayahuasca y cómo esta clasificación desproporcionada dificulta (como efecto colateral) la práctica del ritual religioso del Santo Daime.
Otro argumento que utilizará la defensa del Santo Daime es la jurisprudencia generada en enero de 2022 por el Conseil Constitutionnel, el órgano que vela por la conformidad de las leyes con la Constitución francesa. El Consejo Constitucional ha definido la noción de estupefaciente como “todo aquello que es perjudicial para la salud y crea adicción”.
«Esta jurisprudencia es muy importante para nosotros porque, como todo el mundo sabe, la ayahuasca no es ni una cosa ni la otra, con pruebas científicas que lo demuestran. Nuestro primer objetivo ha sido proporcionar a la justicia los mejores estudios científicos que demuestran que la ayahuasca no es tóxica ni adictiva. ICEERS, una ONG que defiende la descriminalización de la ayahuasca en todo el mundo, nos ha ayudado mucho, así como numerosos especialistas en ayahuasca de muchos países del mundo».
La propia ICEERS ha solicitado la descriminilización de la ayahuasca en el Estado francés.
Entre los testigos de la defensa en el juicio del 4 de junio están la coordinadora de Ayahuasca Defense Fund (ADF), Natalia Rebollo, y el psiquiatra especializado en drogodependencias José María Fábregas.
Sin embargo, aunque el tribunal acepte las pruebas científicas y dé la razón al demandado, “la ayahuasca no será desclasificada por todo ello y nuestra práctica seguirá prohibida”. Por eso, en agosto de 2023, recurrimos al Conseil d’Etat, el más alto tribunal administrativo de Francia, para pedir la desclasificación de la ayahuasca”, explica Claude Bauchet en el vídeo. La decisión del Consejo de Estado se espera para 2025.
Sin embargo, aunque el tribunal acepte las pruebas científicas y dé la razón al demandado, «la ayahuasca no será desclasificada por todo ello y nuestra práctica seguirá prohibida. eso no significa que «la ayahuasca no será desclasificada y nuestra práctica seguirá prohibida. Por eso, en agosto de 2023, recurrimos al Conseil d’Etat, el más alto tribunal administrativo de Francia, para pedir la desclasificación de la ayahuasca», explica Claude Bauchet en el vídeo. La decisión del Consejo de Estado se espera para 2025.
«No soy triunfalista, pero soy optimista; eso es lo que me motiva», concluye Claude Bauchet.
* Las inexactitudes y errores científicos de esta decisión de clasificación están minuciosamente documentados en el artículo “Les cent jours de l’ayahuasca” (Los cien días de la ayahuasca) de la psicoanalista Ghislaine Bourgogne, del que hemos extraído un párrafo: “El informe pericial farmacológico en el que el gobierno basó su decisión de clasificación afirma la peligrosidad ‘toxicológica’ de la ayahuasca, utilizando un neologismo (hasta ahora desconocido en farmacología): ‘sumisión química’. Así, se afirma que la ayahuasca es un producto “sectario” que fomenta la sumisión química de sus usuarios sometiéndolos al poder deshonesto de los líderes sectarios”.
Enlaces:
Campaña de crowdfunding ‘Solidaridad con el Santo Daime en Francia’.
“Les cent jours de l’ayahuasca”, (“Los cien días de la ayahuasca”), Ghislaine Bourgogne, psicoterapeuta, 2015.
–«Prohibir la ayahuasca también es atentar contra la libertad religiosa», entrevista con Claude Bauchet, Plantaforma, 11 de abril de 2022.